Quiche de espinacas y beicon para la vuelta de las vacaciones, aún hace calor y mucho así que este quiche es ideal para las últimas cenas en la terraza. Templado esta rico, pero frío también.
Y vamos comiendo un poco de verdura que menudo veranito de picoteos y cervezas.
Tienes que hacerlo que esta rico y muy suave.
Después de unos pasos sencillos el resultado merece la pena.
- 1 lamina de masa quebrada o brisa redonda
- 3 huevos
- 1 bolsa de espinacas frescas Florette de 450 gr.
- 250 gr. de bacon a trocitos
- 200 ml. de nata para cocinar
- 200 gr. de queso rallado (yo use enmental)
- Precalentar el horno 180
- Extender un poco con mantequilla por el fondo y las paredes del molde, para evitar que se pegue la masa.
- Ponerla masa sobre el molde, presionar bien que quede bien plana y adaptada a la forma interior del recipiente.
- Con un tenedor pinchar el fondo y poner un papel de horno, llenar de garbanzos para que no se levante la masa.
- Meter al horno unos 12 minutos, sacar y dejar enfriar.
- Hacer el beicon en una sartén hasta que este dorado (no hace falta aceite) y reservar.
- Cocer las espinacas en agua unos 5 o 10 minutos. Escurrir muy bien y reservar.
- Batir los huevos incorporar mezclar la nata, las espinacas troceadas, el beicon y el queso dejando una poco para ponerlo encima.
- Mezcla bien todo y verter sobre la masa que ya tenemos preparada.
- Poner el queso rallado restante por encima.
- Meter al horno unos 20 o 25 minutos.
- Esta bueno templado y frío.
Si no lo quieres tan verde, pon menos espinacas y otras la congelas para otra vez.